Ayer vimos que asociado al número Pi tenemos el nombre de Arquímedes. Una de sus grandes pasiones eran las curvas. Precisamente tenemos una espiral que lleva su nombre: la espiral de Arquímedes.
Arquímedes pudo calcular fácilmente el área y el volumen del cilindro y del cono, y tampoco tuvo inconvenientes con los correspondientes a la esfera. En todos ellos aparece el número Pi, un número irracional.
De esta manera, Pi está asociado a cualquier figura o cuerpo redondo, y esto resulta fundamental para la resolución de muchos problemas que se presentan tanto en la vida cotidiana como en la ciencia. Su influencia debe haber sido tal que hasta se lo menciona en la Biblia.
Los babilonios y los egipcios también asignaron aproximaciones al número Pi, pero fue Arquímedes quien dio un método para alcanzarlas, que veremos en la próxima entrega.
Antes de irme, y como muestra del fanatismo de muchos por el número Pi, les dejo la siguiente imagen encontrada en Gaussianos …, en la que si lo buscan lo encontrarán.
Seguimos mañana …
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