Christian Goldbach era un matemático aficionado, que no poseía ningún entrenamiento formal. Sin embargo, mantuvo correspondencia con muchos científicos y matemáticos de toda Europa, y fue una de las pocas personas que comprendió los trabajos de Pierre de Fermat y Leonhard Euler. Sus contribuciones a la matemática fueron esporádicas con destellos de brillantez. También hubo lagunas sorprendentes en su conocimiento. Sin embargo, a través de sus comunicaciones matemáticas, pudo participar en las investigaciones matemáticas de su tiempo y estimular a otros hacia resultados fundamentales.
Christian Goldbach nació en Königsberg, Prusia, el 18 de marzo de 1690. Su padre era ministro, y Goldbach recibió una buena educación, estudiando matemática y medicina en la Universidad de Königsberg. Alrededor de 1710 comenzó a viajar por Europa y conoció a varios matemáticos destacados, como Gottfried Leibniz, Abraham de Moivre y Daniel Bernoulli. Algún tiempo después de 1725 Goldbach recibió un puesto como profesor de matemática en la Academia Imperial de Rusia.
Goldbach era un político hábil, y avanzó rápidamente en círculos políticos en detrimento de su investigación matemática. En 1728 se mudó a Moscú para convertirse en tutor del hijo del rey, Pedro II; regresó a San Petersburgo en 1732 y rápidamente se elevó a una posición poderosa en la Academia Imperial. En 1737 tenía la administración de la academia, pero estaba escalando simultáneamente en círculos gubernamentales. En 1742 cortó sus lazos con la academia, y finalmente ascendió al rango de consejero privado en 1760, supervisando la educación de la familia real.
El conocimiento de Goldbach sobre matemática avanzada llegó a él de manera informal a través de discusiones con matemáticos en lugar de una lectura consistente. Se sintió intrigado por las series infinitas en 1712 después de conocer a Nikolaus Bernoulli, y esta fecha probablemente marque el comienzo de su propia investigación sobre ese tema. De sus varios trabajos, algunos de los cuales repiten material ya publicado por otros, dos muestran genuina originalidad: uno trata la manipulación de series infinitas, y el otro se refiere a una teoría de ecuaciones. Goldbach desarrolló un método para transformar una serie en otra sumando y restando ciertos términos sucesivamente. Se permitió que estos nuevos términos fueran divergentes, siempre y cuando el resultado final fuera convergente. En el segundo, Goldbach aplica algunos resultados de la teoría de números para probar si una ecuación algebraica dada tiene una raíz racional. Este método fue desarrollado a partir de una correspondencia con Leonhard Euler, con quien Goldbach comenzó a comunicarse en 1729.
Además de estas contribuciones originales a la matemática, Goldbach se mantuvo al tanto de los desarrollos actuales y entró en el diálogo de los matemáticos con respecto a los nuevos resultados. Por ejemplo, Goldbach comunicó a Euler una de las conjeturas de Fermat sobre los números primos, quien fue capaz de construir un contraejemplo. También es famoso por la conjetura de Goldbach de que cada entero par podría expresarse como la suma de dos números primos.
Goldbach murió el 20 de noviembre de 1764, en Moscú. Aunque Goldbach indudablemente poseía un talento matemático considerable, este no se desarrolló debido a su éxito en asuntos cívicos. Sin embargo, Goldbach fue capaz de estimular la investigación de ideas matemáticas en su propio tiempo, y también en la era moderna a través de su misteriosa conjetura.
Fuente bibliográfica:
- McElroy, Tucker (2005) A to Z of Mathematicians. Facts On File, Inc.